según la ve Ramiro (http://abecedarios.blospot.com)
nota: Ramiro es el colaborador más prolífico que Absurda y Efímera haya tenido jamás. Sigan de cerca esta sección, porque en cola de espera están: El perfume, The Holiday & Fearless)
Empecemos diciendo que a Woody Allen lo quiero como a mi tío. O mejor dicho: tengo un tío tan parecido a Woody Allen que lo quiero por eso. O algo así.
No hay película de Woody que yo vaya a perderme.
Existe un grupo que odia sus películas. Existe un grupo de gente que las ama. Y estamos los que lo bancamos a muerte pero algunas de sus películas no las pasamos ni con miga de pan. Pero siempre le damos oportunidad.
Sabemos que Allen suele hacer comedias a veces sí y a veces no. Esta vez tocó que sí. O que no. No me decido aún después de haberla visto. No me he reído hasta pensar que me muero como en Misterioso Asesinato en Manhattan o como en Anything Else. Pero tampoco me dejó pensando acerca de las relaciones entre nosotros los humanos como suele hacerlo seguido. Entonces no sé a qué genero pertenece.
Bueno... vamos a decirlo porque ya no puedo sostenerlo: la película no es buena. Ya está. Me dolió un poco pero lo dije, a riesgo de verla dentro de dos años en cable y decir “¡no era tan mala, che!”. El hecho de haberla filmado en Londres, y de tener la mayoría de los actores acento inglés de Inglaterra, poco le hacen al espectador normal que busca en sus películas genialidad y distinción. Entonces nos queda mirar lo de siempre:
A Scarlet Johansson no le dieron un papel a su medida (lease: ¡de los que sabe hacer!) y entonces hace un poco de agua. Hasta le pusieron una malla enteriza, con lo que el manotazo de ahogado tuvo que ser literal en la escena de la pileta.
Hugh Jackman, el protagonista masculino, pasa desapercibido tanto en su personaje como en su actuación. Será por eso que el propio Allen se metió en la película para salvar las papas. Hace un par de chistes fiel a su estilo, divierte, pero sin exagerar. Quiero tratar de sacarles un poco la angustia que les está causando leer este comentario mediante el relato de un diálogo intrascendente para la trama pero que hace bien a la risa:
¿Por qué no consideras esto como un agregado de emoción en tu vida? –dice Scarlett a Woody.
Y este contesta:
Oye, cariño, emoción en mi vida es cenar sin que después me duela el estómago.
La trama es policial sencilla. Sin vueltas. Como un cuento de Fontanarrosa: no importa qué cuenta sino cómo lo hace.
Los policiales satirizados han sido siempre motivo de películas baratas de “comedia con tiros” al estilo Will Smith y Martin Laurence. Pareciera ser que Woody Allen vuelve a la fórmula con la que ya hizo una buena película en el pasado (“Misterioso...”) y usa las ideas que le sobraron de aquella joya de la comedia.
Scoop es una película para el cable, sin dudas. En esa circunstancia, ambas partes le dan al otro una dosis equivalente de atención, y nadie se siente estafado.
Teniendo en cuenta que nada de esto va a afectar mi incondicionalidad para con él, y que está sacando una película por año, esta película me deja entretenido únicamente en una cuenta regresiva de 365 a 0 para ver su próximo estreno.
*Nota para Freaks* en dos pasajes de la película, incluyendo los títulos del final, se escucha una canción que es un clásico de Grieg que muchos reconocerán de decenas de músicos populares como SKA-P o Rainbow o Erasure o Rick Wakeman que por alguna misteriosa razón, mezclan en sus temas.
1 comentario:
Y así escribió el tío Ramiro.
¿Podemos aplaudir con todas las letras?
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